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Las Mías, Las Tuyas... ¡Las Nuestras! (Sí, las Deudas)

Un pequeño resumen de cómo salimos de deudas y vivimos libres desde hace 5 años. 


¡A veces la gente no nos cree!, no sé si es por la costumbre de vivir con deudas o que nos han metido en nuestros cassettes (si, un poco viejo el concepto, pero soy de los 80´s) que sólo así se puede hacer un patrimonio de bienes. Pero sí, la realidad es que si se puede, nosotros conocimos de Compass en nuestro noviazgo y una de las metas era entrar sin deudas en el matrimonio.


Jorge Solis y Melissa Mora

Mi lista era variada, yo tenía dos años viviendo sola y los muebles del apartamento los compré con una hermosa tarjetita, ¡ay vieran que bonito! yo la pasaba y pasaba y ella crecía y crecía. El ejemplo de mis padres al pagar deudas hizo que yo creciera con el concepto de que el dinero era malo, y vi a mis papás sacrificarse mucho para poder sobrevivir. Mi mamá me enseñó el orden desde el primer salario, me enseñó a separarlo en sobrecitos y estar siempre conciente de lo que recibía, pero nadie me enseñó a usar una tarjeta de crédito, yo veía que era la extensión de mi salario. ¿Y los intereses? no, tampoco me lo enseñaron y pues aprendí "a la brava" como decimos aquí en Costa Rica.


Vehículo Pickup




Jorge, mi esposo, tuvo una formación diferente y unas creencias sobre el dinero casi opuestas a lo que yo creía. Él sí era más "aventurero" al gastar. Y pues, al adquirir el carro de sus sueños, su deuda era de más de treinta mil dólares.





Como bien dice el título, "las mías": son mis deudas, y "las tuyas": las de Jorge, y no habíamos meditado que esas deudas se iban a convertir en ¡las nuestras!. Cuando éramos novios, una amiga de Jorge, que en paz descanse, lo invitó a llevar un curso de finanzas con la Biblia (Crown, versión evangélica), y lo llevamos juntos; yo no quería nada con el tema del dinero porque para mí era malo, y a Jorge le llamó mucho la atención porque jamás creía que el dinero tenía algo que ver con Dios. Hay un antes y un después de ese curso, nos puso en perspectiva de lo que realmente quiere Dios para nosotros y de cómo quiere que seamos íntegros con el manejo de los bienes que Él nos ha dado. Nos dimos cuenta que habíamos sido malos administradores y nos propusimos cambiar. Puedo decir que nos comprometimos sin anillo en ese curso, porque hicimos juntos nuestro presupuesto individual y luego de pareja, y yo dije ¡ah! ¡entonces sí es en serio!Nos pusimos como meta entrar sin deudas al matrimonio, y bueno, gracias a la ayuda de un tío pude cancelar la deuda de la tarjeta, esto para que ya no me cobraran intereses tan altos y a él le pude cancelar al poco tiempo. En el caso de Jorge le bastó una llamada de atención que lo hizo entrar en razón, vendió el carro de los sueños y lo convirtió en otro que en realidad ese si le daba un sueño más placentero, logró pagar todo 15 días antes de la boda. ¡Y así nos casamos!


Pero, ¿y qué pasó después? el curso nos había cambiado tanto la perspectiva del dinero, entendimos que el dinero no es bueno ni malo, sino una simple herramienta de intercambio que si la sabemos usar bien puede mejorar nuestra relación con Dios. Este curso fue tan bueno para nuestra vida que queríamos que en Costa Rica se diera desde la perspectiva católica. Al tiempo logramos contactar a la directora de Compass Internacional, nuestra amada Eva, que ha sido como una madrina y guía, y logramos abrir Compass Costa Rica junto a unos grandes amigos en la salita de la casa que Dios nos prestó, ¡hasta la mamá de Jorge estuvo en el curso!



Primer curso Compass Católico Costa Rica
Así empezó Compass en Costa Rica


Bendito Dios, han pasado muchas personas y esperamos que la semilla de estas enseñanzas lleguen a muchos más hogares y vidas.Gracias por llegar a leer hasta aquí, espero te hayas identificado un poco con nosotros. Yo sólo quiero decirte, estimado lector, que si se puede, nosotros tenemos paz, Dios es el dueño de nuestro matrimonio porque su lugar no lo ocupa el dinero ni otro dios. Y el ser libres de las deudas nos ha permitido poder compartir el tiempo, tesoro y talento para que muchas personas sepan que con Dios si se puede, a Él no se le fue ningún detalle, todo nos lo explica en su Palabra. Te invitamos a decir ese "sí" como María, decirle sí a Dios y cambiar lo que haya que cambiar para mantenerte libre. Inscríbete aquí para el próximo curso.


Comenta cómo ha sido para ti en tu noviazgo o matrimonio el manejo de las deudas. 


Para gloria de Dios Melissa MG




Melissa Mora Costa Rica







Escrito por:

Melissa Mora

Directora de Compass Católico Costa Rica.





















Si quiere conocer más sobre Melissa y Jorge vea su testimonio en el programa Aprender a Sostener Juntos Las Finanzas:




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